¿Sufres cistitis por el Tamoxifeno?

Los arándanos fueron uno de mis descubrimientos casi al final de los cinco años del tratamiento con Tamoxifeno y fueron un gran descubrimiento. Estoy encantada con ellos.

La verdad que sabor, sabor… no es que tengan mucho. Diría que son más bien neutros, al menos los que yo compro.

Pero dan un color brutal al zumo, en los muffins y magdalenas me pierden y con yogur me encantan.

Pero sobre todo los he empezado a adorar porque son un remedio natural contra las infecciones de las vías urinarias, como la aborrecida cistitis, y funciona de cine.


De vez en cuando, ligado al tratamiento con Tamoxifeno, me da algún ataque de cistitis y una amiga me comentó que su enfermera le había aconsejado que probara con arándanos: que eran mano de santo para la cistitis.

Así que en cuanto volvió a atacarme me fui directa al super, me compré una cajita de arándanos frescos y me hice un zumo en cuanto llegué a casa. Y oye. ¡Funciona!

Aclaremos: no es que con un zumo la crisis se acabe, no. Al menos en mi caso tengo que estar como una semana tomando zumitos o arándanos cada 8 horas aproximadamente.

La cosa es que los síntomas tan incómodos de la cistitis los quita. Y esto queridas, es un alivio: me ha conquistado totalmente.

E investigando un poco resulta que los arándanos son todo un tesoro.

Tienen muy poco azúcar y son ricos en antioxidantes y flavonoides, son antibacterianos y tienen un montón de propiedades que hacen de ellos una super fruta.

No solo previenen y tratan las infecciones urinarias, además son buenos para la vista, la circulación, el cerebro y el aparato digestivo.

Así que se han incorporado a mi cesta de la compra y siempre tengo un par de cajitas congeladas “por si acaso”.